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La menopausia provoca un cambio hormonal que conlleva transformaciones biológicas. La piel pierde volumen y luminosidad, se vuelve más fina, seca, marcada y muestra signos de fatiga. Para contrarrestar estos efectos, hemos desarrollado un tratamiento capaz de compensarlos movilizando la energía y vitalidad del tejido cutáneo. Tu piel experimenta un nuevo comienzo.
ISOFLAVONAS DE SOJA: Estimulan el sistema natural de reparación de la piel y activan su capacidad de regeneración.
GALACTOSIL FRUCTOSA: Mejora significativamente la hidratación de las diferentes capas de la piel.

Para corregir los signos del envejecimiento en una piel sensibilizada, es esencial exfoliar suavemente, restructurar la barrera cutánea, reforzar las fibras elásticas, estimular la producción de colágeno y aumentar las reservas de agua. Conscientes de estos desafíos, hemos formulado un tratamiento retexturizante y redensificante de alta tolerancia.
GLUCONOLACTONA: Molécula natural, emoliente, antioxidante, mejora la función barrera de la epidermis para una piel muy suave e hidratada.
LACTOPEPTIDOS: Activos regeneradores de la piel que inducen la producción de colágeno y ácido hialurónico.

La reactividad de una piel intolerante es más pronunciada debido a que su capacidad de autoprotección está disminuida. Para reforzar su defensa natural y aumentar su capacidad de resistencia al estrés ambiental, hemos formulado SKINBIOTIC Fluide. Altamente concentrado en postbióticos cutáneos, reequilibra el microbioma y las pieles sensibilizadas.
LIPOAMINOACIDOS: Fuente natural de ácidos grasos esenciales, mejora las membranas celulares, regenera y refuerza la película hidrolipídica natural de la piel y reduce su sensibilidad.
FERMENT BIFIDUS: LACTOBIFIDUS: Los postbióticos cutáneos aumentan las defensas de la piel, la protegen y reducen su reactividad.